Foto: Tomás Montero Torres, 24 de marzo de 1947
por Lola Zavala
Lunes 15 de abril de 1957, 7:45 am. En la ciudad de Mérida (Yucatán), una avioneta cae y choca de punta entre las calles 54 sur y 87 en el patio posterior de una casita. El avión, cargado de gasolina, arde incontrolable consumiendo a todos sus pasajeros, incluyendo un par de perros mastines, un pequeño mono y a una pobre muchacha de 18 años que lavaba ropa en el patio de su casa. Entre los tripulantes se encontraba el «Capitán Cruz» identificado exclusivamente por sus joyas: una esclava de oro, un anillo y un reloj. El resto de su cuerpo queda reducido a 77 cm de negro dolor. El país entero se estremece con la fatal noticia y lo llora como a ninguno. ¡HA MUERTO PEDRO INFANTE!
Las fotografías son del Archivo Tomás Montero Torres (1947)
Maurice Tillet, el ángel francés, destacado luchador profesional, apasionado del ajedrez y modelo de fotografías…
Irving Penn: Fotografiar un pastel también puede ser arte.
¿Cómo seguir viviendo tras aquél funesto 11 de septiembre de 1973?
Una comunidad de San Francisco está convencida de que el sonido que Coltrane conseguía era…
por Raíces al aire Vivan los mexicanos y mexicanas que no pierden la esperanza. Vivan las…
por Laura Martínez Alarcón ¿Cuántas mujeres heroínas de la Independencia de México podrías nombrar?…
Ver comentarios