El viejo en el puente
por Lola Zavala En memoria de Ernest Hemingway 2 de julio de 1961Ya no podía escribir. Las palabras lo habían abandonado. Una profunda depresión lo ahogaba, no se sentía capaz de continuar. Había vivido intensamente y lo había contado como nadie. Hilvanó letra a letra con gran talento y tremenda maestría. Pero hacía tiempo que se encontraba enfermo, muy enfermo. Se sentía perseguido y huérfano. Un domingo de madrugada, de puntitas para no despertar a su mujer, se levantó de la cama y se puso…